07 diciembre 2010

Historia de mi primer Maratón

Para mi la carrera comenzó una semana antes, con muchos nervios y muchiiisimas dudas acerca de si la preparación sería la adecuada.El viernes, preparando la mochila para llevar a Lisboa, más dudas, más nervios y comienzo a pensar en que momento se me ocurrió a mi enfrentarme a semejante locura.
El sábado temprano partimos en coche los tres que comenzamos hablando casi en broma de hacer una maratón y que allí estábamos a 24h del pistoletazo de salida. Un viaje de unas seis horas amenizado por los comentarios de objetivos, sensaciones, etc. Lo primero que nos sorprendió al cruzar la frontera fue … el precio de la gasolina, mimadriña “están locos estos portugueses”, además de cogernos desprevenidos, que sino hubiésemos llenado el depósito en Galicia.
Llegamos a Lisboa a mediodía y localizamos la pensión después de dar unas cuantas vueltas, comemos, dejamos las cosas y nos vamos a la “Feria de la maratón”, donde deberíamos recoger los dorsales.
La feria era más bien escasa, unos siete u ocho stands. Como aún quedaba bastante para la “pasta party” fuimos a dar una vuelta, pero tuvimos que volver al pabellón porque hacía un frío descomunal, quien diría que al día siguiente iba a ver termómetros marcando 20º. Cenamos sobre las 20h para acostarnos pronto.

El día de la carrera:

Nos despertamos a las 6:15 para desayunar. Carlos puso la alarma a esa hora y le dijo a Iván que pusiese la suya a las 6:17 por si acaso (por qué a las 6:17? no lo sé, pero creo que Iván tampoco lo entendió, y así nos lo hizo saber en cuanto se despertó.)
Cogemos el metro para ir hasta la zona de salida. Allí ya se nota el ambiente de un día de carrera, probablemente porque a esas horas los únicos que cogíamos un metro un domingo por la mañana somos los locos que vamos a correr algo más de 42km. Los nervios en aumento.
Salgo del metro y me doy cuenta de que en aquella entrada es donde había quedado con Grimo, con el que tenía intención de salir. Pienso: “Primero dejo las cosas en el guardarropa y luego vengo corriendo hasta aquí”. No hizo falta, nos encontramos de camino.
Dejo la mochila, desbebo y para la salida. Grimo me comenta que tengo una cara de acongojado impresionante. No creo que se reflejase en mi cara todo el miedo que sentía.

Dan la salida. Comienzo a correr y parece que me voy tranquilizando, hablando con mi compañero de viaje. Comenzamos a subir, a bajar, a subir, a bajar... Después de 7km todavía no habíamos cogido unos miserables metros llanos. Ya no puedo con las piernas, van como piedras. En la primera cuesta con un desnivel relevante decido echarme a andar (la primera de las tres veces que tuve que pararme) y Grimo para conmigo (Gracias!!). Una vez arriba, volvemos a trotar, no es que vaya demasiado bien, pero van pasando los km.

En el km 20 está el primer avituallamiento sólido, en el que tenía intención de coger las barritas de cereales que habían prometido y con las que contaba como principal fuente de energía. No había. Bebí isotónica y me tomé un gel.
Poco después del medio maratón, con el viento en contra, tuve que parar por segunda vez (aquí pudo más la cabeza que las piernas) y Grimo ya continuó a su ritmo. No estuve demasiado tiempo andando, al rato me puse a correr a un ritmo casi ridículo, pero que me ayudó a recuperarme, tanto física como mentalmente. Comparto varios de estos kilómetros con una señora italiana muy agradable.
Peeero unas rachas de viento bastante fuerte me hicieron tener que pararme una última vez cuando rondaba el km 31 y quedarme sin la compañía de mi nueva amiga italiana.
Poco duró esta parada, porque, en cuanto noté el viento por la espalda, me dije: “esta hay que aprovecharla”. Volví a correr animándome a no parar hasta el km 35, donde había otro avituallamiento sólido. Y lo conseguí, pero no había dicho avituallamiento, sólo agua y unos dados de mermelada. Ya no paré.
Llegados a este punto no hay vuelta atrás. Me veo por primera vez en toda la carrera llegando a meta. Me vengo arriba, aunque contengo el ritmo, consciente de que queda una subida de unos 3km y no quiero tener que pararme otra vez. Al enfilar la cuesta comienzo a adelantar a gente que va andando y eso me da más ánimos. A unos 100m veo la camiseta rosa de la señora italiana. Cuando paso a su altura la animo con una palmadita en la espalda. Tarda unos instantes en reaccionar pero luego me grita: “Bravo!! Bravo!!”.
En esta vorágine de sentimientos me topo con varios compatriotas coruñeses: Los primeros subían andando y me “identificaron” por la camiseta de la Coruña10. Al otro coruñés no lo había visto, pero de repente oigo un grito de “Ánimo Coruña” y, al mirar hacia el lugar de donde provenía la voz, veo a un chico levantando su sudadera para mostrarme una camiseta igual a la mía. Lo saludo esbozando una sonrisa y tratando de no perder la concentración, ni el ritmo.
Entre unas cosas y otras ya estoy casi arriba. Llego arriba sin grandes problemas. Ya sólo queda bajar hasta el estadio y dar media vuelta a las pistas de atletismo. Bajo con la sonrisa tonta de la felicidad de estar a punto de superar un reto. En la entrada al estadio están Carlos e Iván animándome. Ya sólo queda deslizarse por el tartán para cruzar la META.
Paro el crono en un tiempo demasiado malo, pero ¡que carallo! terminé mi primera maratón.
En las gradas de la llegada está Grimo, que hizo una buena carrera, nos saludamos y le agradezco la compañía durante esos kilómetros iniciales (sino creo que hubiese abandonado en el km 15)
Voy en busca de mis compañeros de viaje, Carlos e Iván, y nos contamos un poco las impresiones de cada uno. Todos contentos.


A medida que pasan las horas, cada vez me siento más orgulloso de haber acabado la maratón y me fijo menos en el tiempo que invertí en ello.


Por el momento no voy a contar nada más, aunque me dejo cosas en el tintero.

Maratón de Lisboa

En resumen, llegué

Esta semana haré una breve crónica y os contaré algo más







13 noviembre 2010

El gran reto (segunda parte)

Con el entrenamiento casi acabado para la Maratón de Lisboa, debo decir que no me siento bien preparado.

En resumen, los entrenos no me acabaron de convencer, no sé si estarán hechos de forma correcta ni si serían suficientes.

Aún encima esta semana, cuando tenía que hacer una de las tiradas más largas, me torcí el tobillo y no entrené ningún día. La semana que viene también tendré que estar parado, trataré de hacer alguna salida en bici de 5 ó 6 horas y mantener el tono muscular en el gimnasio. A ver qué pasa.


10 octubre 2010

Disculpad que me salga de la temática habitual de este blog, pero creo que este video vale la pena.

Como muchos sabéis provengo de una familia de maestros, muy en desacuerdo con el modelo educativo actual, y más en concreto con el papel de los padres en la educación de sus hijos. O más bien la falta de educación.

Este video resume un poco la opinión de muchos educadores (de otros no, sino no se hubiese llegado a la situación actual.) Tiene más de un año, pero no lo había visto hasta hoy, que me lo envió mi hermana por correo:

Al ver este video me acordé de otros que había visto de un juez de menores de Granada, para aquellos que les gustó el primero, seguramente les gustará este también:





18 julio 2010

El gran reto




En el afán de superación que caracteriza a cualquier deportista (es curioso, es la primera vez que me llamo a mí mismo deportista), continuamente te planteas nuevos objetivos.

Hace no muchos meses estaba asustado al intentar afrontar el primer medio maratón y ahora ya estoy con ganas de terminar un MARATÓN, casi nada!!
Si las cosas van como yo quiero, “el gran reto” será en Lisboa el 5 de diciembre de este año.

Hasta allí quedan unas cuantas semanas de buen entrenamiento, alguna que otra tirada larga (espero que una a la semana, a partir de septiembre) y rezar para que no aparezca ninguna lesión inoportuna.
¿Objetivo? Por supuesto, llegar. Creo que un tiempo bastante realista serían 4h 15’, aunque no me importaría invertir más tiempo, por el placer de cruzar la línea de meta.

24 mayo 2010

Rendimiento relativo

Como os vengo comentando últimamente, no me encuentro demasiado bien ni física ni mentalmente, y mi rendimiento en las carreras está siendo bastante mediocre. No es que me importe demasiado, ya que las disfruto igualmente.

Sin embargo este fin de semana repetí una carrera por primera vez (la de Ordes, la que fuera mi primera carrera) y las sensaciones fueron bastante malas, pero rebajé en 10 minutos el tiempo del año pasado.

Lo que me hace pensar que, aunque no estoy en forma, hubo tiempos peores y llegarán tiempos mejores (lo de los tiempos en todos los sentidos).

21 mayo 2010

Media Maratón Coruña21


La crónica de la carrera llega tarde, mal y a rastras. Más o menos como fue la carrera...

Al llegar a la zona de la carrera una hora antes de que comenzase, ya se vivía un muy buen ambiente. Me dirigí a la salida donde había quedado con Rubén y Carlos. Cuando llegaron empezaron las apuestas en cuanto al tiempo de cada uno. Carlos, encendido, estaba con muchas ganas y se propuso 1h40’, Rubén, un poco reservón, dijo que salía conmigo para intentar bajar de 1h50’.

En los momentos previos a la salida veo a safardatxo y me acerco a saludarlo. Comenta que viene sólo a dar una vuelta al recorrido (3 vueltas de 7km) y lo animo a que haga todo, aunque creo que ya estaba convencido de que una vez en carrera no se iba a parar.

Rubén y un servidor salimos juntos, aunque en el km 4 aproximadamente me deja, ya que tiene más ritmo que yo y más ganas de ir deprisa. Durante el resto de la vuelta, toca controlar el ritmo, ya que sé que la carrera se va a hacer larga.

En la segunda vuelta trato de ir a más, y la impresión es que voy más rápido, aunque los tiempos dicen que salió calcada a la primera.

Y la última vuelta.... mimadriña. Tocó sufrir.

Crucé la meta en 1h50’ y unos segundos. Tiempo esperado, pero sensaciones malísimas

En cuanto a los otros dos:

Rubén: 1:47:00

Carlos: 1:38:18

Espectacular Carlos, genial Rubén.

Esta vez no nos pasó como en Pontevedra, llegamos a tiempo para la fisioterapia, que le sentó de maravilla a mi sobrecargado peroneo

11 mayo 2010

Carreira O Pino (e impresiones para la Media de Coruña):

Este fin de semana tocó desplazarse a O Pino a una preciosa carrera de 8,9 km en compañía, como suele ser habitual últimamente, de Carlos. Había que dar tres vueltas a un recorrido mixto, asfalto y tierra, que la climatología se encargó de convertir en asfalto-barro.
Como digo, la climatología no fue demasiado buena, aunque a mi esto no me disgusta demasiado, ya que soy de los que sufren muchísimo más con el calor.
Aún en estas condiciones, creo que la organización fue perfecta, tuvimos abierto un polideportivo donde pudimos calentar y estirar antes de la carrera sin mojarnos, gente indicando las intersecciones, cronometraje por chip, fruta e isotónica en meta, camiseta, duchas... no creo que se pueda pedir más, no?
Como colofón de una gran tarde, me encontré con Isa y Santi (Fip y Orzowei), con los que había compartido bastantes carreras y que fue una alegría volver a verlos, aunque casi no hablamos, ya que me fui a coger las cosas para ducharnos y no los volví a ver.

Ella me sacó esta foto:





En cuanto al rendimiento deportivo, creo que no fue ni bueno ni malo, hice la carrera a un ritmo de 5’/km, aunque he de reconocer que no sufrí en ningún momento, no tenía ganas, sólo fui disfrutando de la carrera.

En estas condiciones me voy a enfrentar este domingo al que será mi segundo Medio Maratón, con la moral algo baja y con un entrenamiento muy escaso, sin ritmo ni km en las piernas.
Aún así, lo afrontó con cierta ilusión, ya que juego en casa (la familia estará apoyando), el recorrido es totalmente llano, y no me planteo objetivo ninguno, sólo terminarlo (que ya es bastante)... y volver a ver algunas caras conocidas.

28 marzo 2010

Promoción del deporte

Recuerdo cuando de pequeño iba con mi padre y los equipos que él entrenaba en el colegio cuando era profesor de educación física. Recuerdo las competiciones entre colegios en que durante una mañana se enfrentaban en todo tipo de deportes. Recuerdo los malabarismos que hacíamos para entrar todos en el coche y lo bien que nos lo pasábamos en aquellas mañanas de domingo de sano deporte escolar.
Ahora de todo aquello poco más quedan que recuerdos, y los esfuezos desinteresados de algunos profesores, que aún encima tienen que asumir una responsabilidad superior a la que tendrían que asumir los padres con sus propios hijos.

Creo que la inversión en promoción del deporte es escasa por parte de la gran mayoría de entidades públicas, se organizan pocos eventos deportivos y se promocionan aún menos. Porque de nada sirve organizar algo si no se entera nadie.

Pero no quisiera culpar de todo a los organismos públicos, diría que es el conjunto de la sociedad el que tendría que reflexionar al respecto. Los padres deberían inculcar a sus hijos el interes por el deporte (entre otras cosas, como la lectura, la ciencia, el arte, etc, es decir, educarlos) y no esperar que sean otros los que despierten ese interes en ellos. Los educadores informar y animar a sus alumnos. Los organismos públicos invirtir más y mejor en organizar y promocionar los eventos deportivos y ayudar y facilitar los medios de los que disponen para que aquellos que quieran organizar algo se encuentren más animados a continuar haciendolo. Pienso que no sería complicado, pero hay que querer hacerlo.

Quisiera que no se viese el deporte como una simple actividad física, es mucho más que eso, es una parte fundamental de la educación. Con el aprendes a compartir, solidarizarte con tus compañeros, esforzarte, competir y, lo que considero más importante, aprendes a perder. Lecciones que te puede enseñar la vida de forma traumática y que asi podrás asimilar divirtiendote.
Por eso creo que promocionar el deporte, es más que luchar contra la obesidad y el sedentarismo, es una inversión de futuro.

18 marzo 2010

No hay vuelta a la normalidad

Tengo un poco abandonado el blog últimamente. Son varias razones las que me provocan esta ausencia. Por un lado no estoy muy motivado para escribir. Por otro, llevo unos meses que no puedo entrenar bien una triste semana. Primero un esguince, luego una tendinitis...

Se empieza a esfumar la idea de hacer la Vig-Bay y el lograr alcanzar mis objetivos, que creo que voy a tener que replanteármelos.


Por otra parte, esta semana nos ha dejado un “joven” atleta llamado Julián Bernal. La mayoría ya sabéis de quien hablo, para los demás, deciros que es un ejemplo a seguir y el gran objetivo de mi vida atlética, ser como Julián, el hombre que vivió hasta el final de su vida. DEP.

25 febrero 2010

Vuelta a la normalidad

Recién recuperado del esguince y con la vuelta a las clases, se puede decir que he vuelto a la normalidad.
Esta semana será la primera en que entrene como debería desde hace una temporada, que sólo entrenaba lo que podía entre los exámenes y la inoportuna lesión.
Durante estas dos semanas me he dado cuenta de que sigo disfrutando como un enano con los paseos en bici por pistas embarradas y llegando a casa como si me hubiese tirado a una piscina de lodo.
El tiempo libre me ha hecho reflexionar sobre muchas cosas, quizás demasiadas, pero en lo que respecta al deporte me he planteado la posibilidad de realizar algún duatlón de cross. Esto tendrá que esperar, por lo menos a que cumpla los objetivos que me plantee en la carrera a pie, pero es una nueva línea en la lista de cosas que quiero hacer, a la que recientemente añadí también el maratón.
Dentro de esta normalidad está la de participar en carreras casi todos los fines de semana, en esta ocasión tocará pasarse por Porriño, donde voy a coincidir con bastante gente con la que compartí muchas carreras y que hace demasiado que no veo. Espero impaciente este reencuentro.




De objetivos para esta carrera casi mejor no hablar, después de una temporada de malos entrenos, lo que tengo claro es que en el plazo de un mes, aproximadamente, quisiera verme corriendo a mi ritmo con cierta facilidad.

10 febrero 2010

Me aburro

Por fin tenía una semana libre en la que me había planteado no hacer otra cosa que entrenar y andar en moto.

Pues ayer; en el segundo entrenamiento de la semana, me hice un esguince que echó por tierra mis ilusiones.

La cosa fue de la forma más absurda posible, yo solito. Me disponía a hacer las series que me tocaban, para lo que estaba con un buen calentamiento que consistía en dar unas vueltas por el paseo de la playa de Oza, ya que allí hay un camino de tierra bueno para correr. Entre dicho camino y el carril bici hay unos adoquines elevados para separar las dos zonas. Como estaba encharcado el camino, me cambie hacia el carril bici y pisé uno de esos adoquines medio de lado y allá se fue el tobillo.


Ahora toca echar mano de un par de libros que tengo pendientes de leer y rezar para que en unos días pueda, al menos, ir al gimnasio a mantenerme un poco y en unos días más poder salir a dar una vuelta en bici.


La moto espero poder cogerla en un par de días, que es el pie derecho y no tengo costumbre de frenar de atrás...

18 enero 2010

Carrera Popular San Xiao

Sensaciones contradictorias las que me dejaron la carrera de ayer en Ferrol.

En lineas generales me salió una buena carrera, aunque estubo condicionada por la mala organización de la misma.
Había que dar una vuelta pequeña cerca de la salida y luego hacer una vuelta larga para completar los 10 Km. Cuando ibamos por el kilometro 3-4 (no estaban indicados los km) un corredor que conocía el recorrido me comenta que nos saltamos la vuelta pequeña. Entonces pienso: "Si la carrera va a ser más corta voy a darle zapatilla a lo loco". Cojo un ritmo bastante bueno, creo que por debajo de 5'/km. Al ver la zona de meta cerca acelero un poco más, peeero cuando estoy llegando me doy cuenta de que aún me falta algo más de una vuelta a un curcuito pequeño, ya que empiezo a ver a los que corren "de verdad" que nos están doblando.

Aqui empieza el caos, todos lo corredores juntos, no se sabía quien tenía que ir para meta y quien tenía que seguir por el circuito. Hubo muchos que fueron para meta cuando tenian que haber seguido, no sé si por equivocación o por atajar.


Dentro de este caos, y a pesar de haber ido a buen ritmo toda la carrera, me encontré genial y aún me permití disputar (y perder) un buen sprint en meta con un señor, con un aún mejor abrazo deportivo despues de cruzar la meta. Es un detalle que no olvidaré.

Al final un ritmo medio de 4' 40'', que me hace pensar que voy por buen camino para alcanzar los objetivos marcados.

01 enero 2010

Dorsal San Silvestre Fluvial de Lugo

Aprovecho el dorsal de la carrera de ayer, 31 de diciembre de 2009, para felicitaros a todos el nuevo año.


Feliz

Con gorro y a lo loco

En esta época festiva, que mejor manera de pasar una mañana de domingo que juntandonos unas 400 personas para correr unos 10km con gorrito de Papa Noel.
La cita fue en Mugardos y el recorrido consistía en ir hasta el cercano pueblo de Ares y volver al punto de partida.


La carrera no me pareció dura, aunque corrí a un ritmo bastante relajado. La primera parte del recorrido la hice con un chico al que no conocía hasta entonces y viendo como un chico de un grupillo de delante animaba el cotarro sacando fotos y parando para saludar a los niños, y contagiandonos a todos ese ambiente festivo.
Un gran día para disfrutar sin forzar la máquina.

Lo mejor vino despues, ya que la organización había preparado unos muy buenos pinchos con empanadas, jamón asado, fiambres varios y un monton de cosas ricas que se podían regar con cerveza, cocacolas, fantas o agua. Una maravilla.






Ayer tambien acudí a otra carrera festiva, la San Silvestre de Lugo. Aquí la cosa ya no era tan relajada. Lo tipico en las carreras cortas (6.5Km), la gente sale a lo loco y los que teníamos intención de ir un poco relajados, nos contagiamos.
Una buena carrera que, si no hay para el año San Silvestre en Coruña, repetiré.